El poder de las tetas.
Hoy hace un año y 10 días que me liberé de dos grandes pesos que me atravesaban la vida.
Hoy hace un año y 10 días estaba enfrentándome al miedo de entrar en un quirófano.
Hoy hace un año y 10 días la felicidad corría por mis venas al despertarme y ver que mi sueño, el que anhelaba desde hace tanto tiempo, el que suplicaba por las noches que sucediese, el que tantas estrellas fugaces y pestañas me había robado, se hacía realidad.
Hoy hace un año y 10 días comenzaba mi vida, una vida en la que poder ser yo, poder sentir, poder verme, poder SER.
Hasta qué punto unas tetas pueden marcar tu vida, hasta qué punto unas tetas en sociedad tienen el poder de hacerte sentir así... Muchas de las personas trans masculinas con las que hablo me dicen lo muchísimo que desean que llegue el día en el que se puedan mirar al espejo y verse. Pero sobretodo que llegue el día en el que la sociedad me vea como me veo yo. Quiero ir a nadar, pero claro, el bañador, las miradas, los prejuicios, los vestuarios.
Tras un año de untar rosa de mosqueta, hacer ejercicios determinados, tomar complejos vitamínicos de ayudan a la cicatrización, puedo decir que es la mejor y más acertada decisión de mi vida.
Hasta que no te das cuenta de que no tienes un privilegio no te das cuenta de que lo tienes. Los hombres ya no me miran por la calle, no hay escote, no hay bultos, no hay un objeto de sexualidad y una posesión, no hay una violación de la intimidad en las sucias miradas, no hay sensación de acoso en los espacios poco iluminados o cerrados. No hay un hija mía no vengas tarde no vaya a ser que te pase algo. No hay un no cojas el metro sola, por lo que pueda pasar. No hay un no, no, al retiro a estar horas que dices, nos violan fijo.
He perdido los pezones, los injertos no agarraron del todo bien. Eso supuso un trauma al principio para mi, la gente lo va a saber, se van a dar cuenta. El miedo, la impotencia recorría mis entrañas. Anduve. Vi. Sentí. Y poco a poco me dí cuenta de que no iba a dejar que unos pezones condicionarán mi vida. Y si la gente se da cuenta, me da igual, porque es quien soy, es lo que soy y voy a luchar por mi y visibilizar hasta el final. Nadie me va a decir lo que vale y lo que no, lo que es estético y lo que no, la diversidad existe señrxs! y yo soy una pequeña muestra de ello, y mis pezones también.
SOY TRANS, SOY VISIBLE #MisPezonesTambien
